Siete puñales, catorce armas de fuego, más de 7.000 cartuchos… El 18 de octubre, los gendarmes descubrieron un arsenal de guerra en casa de un tal Eurois, padre de tres niños pequeños. Este lunes fue condenado por el tribunal penal de Évreux a 18 meses de prisión, 12 de los cuales suspendidos por «posesión no autorizada de armas, municiones o sus elementos de categoría C, B y A» y «modificación de un arma que conduce a un cambio de categoría”, supo Le Figaro desde la gendarmería. El autor se benefició de una pena reducida con arresto domiciliario bajo vigilancia electrónica.

Bajo custodia policial, este tirador deportivo de 39 años habló de su pasión por las armas, fascinación que le llevó «a un frenesí de compras» en los sitios de venta en línea. Comportamiento sospechoso que llamó la atención de la policía a principios de septiembre.

“La cantidad de armas adquiridas por el interesado, así como las preguntas que dirigió por escrito a los vendedores, llevaron a los militares de la sección de investigación de Rouen y al grupo de gendarmería Andelys a solicitar el análisis de la investigación del Plateau d’sobre explosivos y armas de fuego ( PIXAF)”, especializada en investigaciones relacionadas con armas y explosivos, nos dicen.

Al final de sus investigaciones, los expertos de PIXAF estimaron que “el destino final de uso” de esta arma era “preocupante”, “pareciendo muy alejada de la simple práctica deportiva del tiro”. Por tanto, el fiscal de Évreux, Rémi Coutin, ordenó la incautación del arsenal y la detención del sospechoso y de su socio.

Además de las armas de fuego y cuchillos, los investigadores descubrieron en su domicilio un hacha, una picana eléctrica, un escudo con el logo de “Policía”, chalecos antibalas y esposas. El tribunal ordenó la incautación de todo su arsenal y prohibió al tirador deportivo la posesión de armas durante 15 años.