El grupo informático estadounidense Microsoft registró en los tres primeros meses del año resultados que superaron las previsiones del mercado, incluso en la actividad clave de la informática a distancia (la nube), cuya importancia se vio reforzada por la aparición de la inteligencia artificial. El beneficio neto del grupo aumentó un 20%, hasta 21.900 millones de dólares.
La división Intelligent Cloud, que reúne actividades de centros de datos, servidores y software que se pueden utilizar de forma remota, vio su facturación aumentar un 26%, la tasa más rápida en dos años. Esta rama representa actualmente alrededor del 43% de los ingresos de Microsoft, que cada día se aleja más de su modelo histórico, basado únicamente en el sistema operativo Windows y su paquete de software.
«El camino hacia la monetización de la IA es el más claro para Microsoft», en comparación con sus grandes rivales Alphabet, Meta o Amazon, reaccionó en una nota Sophie Lund-Yates, de Hargreaves Lansdown, «el grupo ya retira los dividendos de sus miles de millones». de inversión en tecnologías como ChatGPT y Dall-E que ofrecen capacidad de creación y uso hiperpersonalizado” a los usuarios de productos Microsoft, añadió Jeremy Goldman, de la firma eMarketer.
Este último capitalizó así su inversión en OpenAI, cuya interfaz generativa de IA ChatGPT revolucionó el mundo de las tecnologías de la información a finales de 2022, y que ha integrado en muchos de sus productos y servicios. Microsoft también generó crecimiento en sus otras dos grandes divisiones, servicios profesionales (12%) e informática personal (17%), que incluye Windows, dispositivos y la consola XBox.
Las ventas de contenidos y servicios vinculados a estos últimos se han disparado (62%), gracias a la integración del editor de videojuegos Activision Blizzard. En total, la facturación asciende a 61.900 millones de dólares, un 17% más interanual. En el comercio electrónico después del cierre del mercado de valores, las acciones de Microsoft ganaron casi un 5%.