Es un “jueves negro” que se avecina en los aeropuertos franceses. El aviso de huelga presentado por el SNCTA, el principal sindicato de controladores aéreos, tendrá graves consecuencias el 25 de abril. La Dirección General de Aviación Civil (DGAC), que regula el tráfico aéreo, anunció según BFMTV que el 75% de los vuelos serán cancelados en el aeropuerto de Orly, el 65% en París-Charles de Gaulle y Marsella, el 60% en Toulouse y el 70% en Lindo. «A pesar de estas medidas preventivas, también son de esperar perturbaciones y retrasos», subraya la DGAC en un comunicado de prensa.

Si los controladores aéreos expresan su enfado es, en particular, por una nueva versión, según ellos «inaceptable», de un protocolo que se está negociando actualmente para reestructurar los servicios de navegación aérea. “La versión publicada (por la Dirección General de Aviación Civil, DGAC) no es de ninguna manera firmable para el SNCTA, que la considera una provocación, si no un insulto”, menciona el sindicato en su sitio web.

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Las negociaciones, que comenzaron hace 15 meses, prevén reformar la red territorial de servicios de navegación aérea y reorganizar el trabajo de los controladores para hacer frente al aumento anunciado del tráfico aéreo, a cambio de aumentos de remuneración y contratación. El SNCTA, que representa el 60% de los votos entre los controladores, evoca sin más detalles un «cambio de rumbo» que pone «directamente en duda la sinceridad de las negociaciones y los compromisos alcanzados hasta ahora». En un comunicado de prensa, la organización indica que se negó a participar en una reunión denominada “de emergencia” por la DGAC el pasado 10 de abril. Otro sindicato, UNSA-UTCAC, también anunció su negativa a participar en esta reunión y también presentó un aviso de huelga para el 25 de abril, exigiendo “el inicio inmediato de una consulta real”.

Pero aunque aún no se ha celebrado la jornada de movilización del jueves, el SNCTA ya anunció el martes que presentó un segundo aviso de huelga para los días 9, 10 y 11 de mayo. Ahora da a las autoridades públicas 15 días para «participar en la búsqueda de soluciones» y acusa a la DGAC «de penalizar duramente a los usuarios del aire en las próximas semanas». Sin embargo, en septiembre de 2023, el SNCTA y la Unsa ICNA -el segundo sindicato de controladores aéreos- declararon una tregua olímpica, prometiendo no hacer huelga por motivos salariales de aquí al final de los Juegos Olímpicos (del 26 de julio al 11 de agosto). ) y Juegos Paralímpicos (del 28 de agosto al 8 de septiembre). “Descubrimos que era sólo parcial”, bromea Pascal de Izaguirre, confiando que no le preocupa el periodo de competición en sí.