La polémica acabó venciendo al presidente del parlamento canadiense. Anthony Rota dimitió tras el escándalo provocado por el homenaje rendido a un veterano ucraniano que luchó con los nazis durante la Segunda Guerra Mundial durante la visita del presidente Zelensky. «Con gran pesar me levanto para informar a los miembros de mi dimisión como presidente de la Cámara de los Comunes», dijo Anthony Rota al Parlamento, hablando de «su profundo pesar por su error».
Este último estaba bajo presión desde el fin de semana pasado, ya que todos los partidos pedían su dimisión, incluidos los líderes de su clan, los liberales del primer ministro Justin Trudeau. Este último habló de un homenaje “inaceptable” y “bochornoso”.
“Lo que ocurrió el viernes es completamente inaceptable”, declaró el martes a la prensa la ministra de Asuntos Exteriores canadiense, Mélanie Joly, en los pasillos del parlamento. «Fue una vergüenza para la Cámara y para los canadienses, y creo que el presidente debería escuchar a los miembros de la Cámara y dimitir», añadió.
