Unos 2.000 soldados y policías extranjeros serán desplegados como refuerzo para asegurar los Juegos Olímpicos de París este verano, mientras Francia está en alerta máxima ante la amenaza de ataques, anunció el viernes el ministro francés de las Fuerzas Armadas.
«Tenemos unos 2.000 policías, gendarmes y soldados extranjeros que vendrán y se insertarán en los sistemas de protección de los Juegos Olímpicos», declaró Sébastien Lecornu al canal de televisión LCI.
El ministro precisó que estos refuerzos se refieren a “funciones particulares: adiestrador de perros, jinetes, patrullas a caballo” para las cuales Francia no dispone de suficientes brigadas para el evento deportivo mundial.
Polonia anunció a finales de marzo que enviaría refuerzos militares y policiales, sin especificar el número, pero en particular «perros rastreadores» con la misión de «operaciones de detección de explosivos y lucha contra el terrorismo».
Para garantizar la celebración de los Juegos, cerca de 45.000 policías y gendarmes serán movilizados en Isla de Francia para la ceremonia de apertura sin precedentes a orillas del Sena el 26 de julio.
Según las últimas cifras, 18.000 soldados franceses también intervendrán durante los Juegos, entre ellos 3.000 aviadores, además de unos 35.000 policías y gendarmes.