Los accionistas de Disney concedieron el miércoles la victoria a la dirección del gigante del entretenimiento frente a los inversores activistas, descontentos con la estrategia del grupo, que querÃan unirse a su consejo de administración.
Poco después de la apertura de la junta general de sus accionistas, Disney indicó, en un comunicado de prensa, que los doce miembros de su consejo de administración candidatos a la reelección habÃan sido renovados «con un margen cómodo».
«Quiero agradecer a nuestros accionistas por su confianza en nuestro consejo y en la dirección», comentó Bob Iger, jefe del grupo, citado en el comunicado de prensa. «Con el disruptivo choque de resoluciones ahora detrás de nosotros, estamos ansiosos por centrar el 100% de nuestra atención en nuestras prioridades más importantes: crecimiento y creación de valor para nuestros accionistas y excelencia creativa para nuestros consumidores», dijo para el seguimiento.
Esta votación es un éxito para él frente al inversor multimillonario Nelson Peltz, de la sociedad de inversión Trian Capital, que lleva muchos meses criticando al consejo de administración por la gestión del grupo. Alrededor de las 19:00 horas, las acciones de Disney cayeron un 2,48%. Trian condenó el regreso al mando de Bob Iger, que ya dirigió el grupo de 2005 a 2020, y el despido del hombre que éste habÃa elegido como sucesor.
En noviembre de 2022, Disney despidió a Bob Chapek y llamó a Iger, actualmente de 73 años, para dirigir el grupo durante dos años. Pero su contrato fue prorrogado en julio de 2023, hasta finales de 2026. Peltz habÃa sometido a votación de los accionistas su candidatura a director, asà como la del ex director financiero de Disney, Jay Rasulo. Una perspectiva que los lÃderes actuales han tratado activamente de prevenir. Trian dijo que estaba «decepcionado» con el resultado de la votación, pero «orgulloso» de su impacto.
«Desde que nos comprometimos con el grupo a finales de 2023, Disney ha anunciado una serie de nuevas iniciativas operativas y proyectos de mejora de capital», dijo. «Supervisaremos el desempeño del grupo y nos centraremos en continuar con su éxito», advirtió.
El inversor lanzó su campaña a finales de 2023, criticando lo que consideraba los decepcionantes márgenes de beneficio de Disney en el streaming y en sus negocios relacionados con los medios en general, asà como una gobernanza deficiente. «La raÃz profunda del bajo rendimiento de Disney (…) reside en el consejo de administración, que está demasiado vinculado a un jefe a largo plazo y demasiado desconectado de los intereses de los accionistas», señaló Trian en diciembre.
La sociedad de inversión posee 32,4 millones de acciones, o casi el 2% del capital de Disney. Recientemente habÃa suavizado sus crÃticas al Sr. Iger, al tiempo que criticaba los torpes esfuerzos de Disney por reemplazarlo. Trian no era el único que querÃa un cambio. En una medida separada pero similar, el fondo de cobertura Blackwells Capital habÃa propuesto el nombramiento de tres directores. También denunció que la junta directiva es demasiado cercana a Bob Iger. Según el Wall Street Journal, esta batalla en la cima podrÃa costar en última instancia más de 70 millones de dólares, lo que la convertirÃa en el conflicto entre accionistas más caro jamás librado.
Desde hace varios dÃas, los medios estadounidenses -refiriéndose a fuentes no identificadas- afirmaban que Disney se encaminaba hacia la victoria. Según Charles Elson, director del Centro Weinberg para el Gobierno Corporativo de la Universidad de Delaware, Disney ha estado luchando «durante varios años» para organizar la sucesión en la cima. Recordó la ya difÃcil transición entre Michael Eisner, jefe de Disney de 1984 a 2005, y Bob Iger. «El consejo de administración ha hecho un mal trabajo para la sucesión», señaló Eisner, quien, antes del anuncio del resultado de la votación, habÃa indicado que Disney estarÃa «bajo el microscopio» incluso en caso de victoria.














