Cuando va a McDonald’s, Lucas siempre pide un «McWrap». Reconocería su sabor con los ojos cerrados. Pero este sábado, la receta de su sándwich favorito fue un poco… diferente. Como cada semana, el joven comió en un restaurante de esta cadena de comida rápida con su equipo de fútbol, en Caudry (Norte), no lejos del estadio de su partido.
Una vez en la mesa, devora distraídamente su sándwich, antes de notar un sabor inusual. “Sentí algo crujiente y eso no era normal. Era muy viscoso y vi una concha de caracol”, dijo a Voix du Nord.
Enfadado por este descubrimiento, acudió inmediatamente al mostrador para denunciar el incidente y exigir una indemnización. Pero los equipos sólo le ofrecieron “un simple helado” sin, según él, ofrecerle una verdadera disculpa.
Decidido a no quedarse ahí, el joven futbolista envió un “correo electrónico a McDonald’s Francia y al de Caudry a principios de semana”. Pero desde entonces “no tengo noticias de ellos, publiqué la foto que había tomado en Facebook. ¡Quince minutos después me escribió el restaurante Caudry!”, dice indignado.
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El director del restaurante franquiciado, Serge Jahier, anunció al diario local que “se ha abierto un expediente”, por falta de trazabilidad o ficha de calidad. El director aclaró que normalmente todos los lotes están identificados, solo falta determinar cuál contenía el envoltorio de Lucas. Se llevarán a cabo “investigaciones”, aseguró, aunque recordó que estas situaciones son muy raras. Se debería dar una respuesta “a principios de la próxima semana” para conocer el origen del problema y poder proponer “ofertas comerciales” al joven deportista.
