Un avión de transporte Hércules C-130 de la Luftwaffe, en cooperación con aviadores franceses, arrojó cuatro toneladas de alimentos al norte de Gaza, que fueron lanzadas en paracaídas, según reveló este sábado el ejército alemán.

“Apenas 72 horas después de que el ministro de Defensa, Boris Pistorius, nos diera luz verde, nuestro avión

“Primer lanzamiento en paracaídas del escuadrón franco-alemán, con tripulación de la Luftwaffe y chicas francesas. Un éxito de cooperación de muy alto nivel”, saludó el Estado Mayor francés. A principios de enero y finales de febrero ya se habían realizado anteriores entregas de ayuda humanitaria con aviones C-130, esta vez por parte de las fuerzas aéreas francesa y jordana. Marruecos también anunció que desplegaría seis aviones Hércules para apoyar estos lanzamientos desde el aire.

Esta nueva operación aérea se produce cuando el canciller alemán Olaf Scholz, de visita en Oriente Medio, pidió a Israel que apoye la transferencia de ayuda humanitaria a Gaza. «Es necesario que la ayuda llegue ahora a Gaza en mayor escala», instó el jefe del Ejecutivo alemán. Sin embargo, los lanzamientos desde el aire, que no pueden ser de gran tamaño debido a las limitaciones inherentes a los aviones, no permiten cambiar de escala y las ONG presentes en la Franja de Gaza los consideran muy insuficientes.

Con el apoyo de Estados Unidos, un puente marítimo con la isla de Chipre intenta compensar el suministro por tierra al enclave palestino, frenado por los controles del ejército israelí. Un primer barco de la ONG española Open Arms, con 200 toneladas de alimentos a bordo, atracó el viernes en Gaza. El fin de la descarga, que equivale a cincuenta veces una operación de lanzamiento en avión, se produjo este sábado.

La situación humanitaria podría empeorar aún más, ya que Israel planea, mientras negocia un alto el fuego temporal con Hamás, lanzar una operación militar, esta vez en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, donde se encuentran refugiados 2,4 millones de palestinos.