Le Figaro Niza

Una librería islamista situada en el centro de la ciudad de Niza, detrás de la estación de tren, cerró sus puertas el miércoles por un período de tres meses tras una orden del prefecto de los Alpes Marítimos, Hugues Moutouh. En una nota consultada por Le Figaro, el representante del Estado señala tanto una “falta de autorización para el uso de videoprotección” como, sobre todo, la venta de obras “que defienden el fundamentalismo religioso”.

Tras las operaciones de vigilancia en este establecimiento, los servicios denunciaron “obras fundamentalistas y vectores de adoctrinamiento”. En los estantes se encontró especialmente el libro Los grandes pecados del Imam Chams Ad-Dhahabi. Contiene “palabras que incitan al asesinato de homosexuales”, precisa el prefecto de Maralpin en su informe. “El profeta dijo: maten a quienes apoyan el acto del pueblo de Lot (la homosexualidad, nota del editor)”, señalaron, por ejemplo, los servicios estatales.

También señalan “comentarios que incitan a la violencia contra la mujer” (“Cuadragésimo séptimo pecado mayor: la rebelión de la esposa contra su marido, corríjalo si es necesario”).

No sería el único, ya que la prefectura subraya “la venta de otras obras de la misma naturaleza […] que abogan por el proselitismo religioso”. Situada en la calle Marceau, la boutique se encuentra en una zona animada y transitada, detrás de la estación principal de la capital de la Riviera. Las autoridades están preocupadas al ver una clientela «de jóvenes, especialmente menores».

En sus redes sociales, la librería “Iqra” también promociona ropa religiosa, que vende además de libros. El administrador también hizo instalar un sistema de videoprotección sin autorización de la prefectura. Tras una notificación formal, había elaborado un expediente “que quedó incompleto”, explica la prefectura, sin haber retirado mientras tanto las cámaras.

Sobre esta cuestión, Hugues Moutouh dice a Le Figaro que “no hay que darse por vencido”. “En estos tiempos convulsos, no se dará nada en el ámbito de los extremos y del adoctrinamiento”, insiste. También indica que se ha puesto en contacto con el fiscal de Niza, Damien Martinelli.

Este cierre de empresa se produce dos días después del anuncio del próximo cierre de un colegio musulmán en Niza debido a una financiación considerada “opaca”.