Los conejos salvajes acusados ​​de dañar los jardines y las tuberías alrededor del Hôtel des Invalides de París fueron capturados desde finales de enero para ser liberados en Seine-et-Marne, supo el martes en la jefatura de policía. «Desde el 25 de enero se han realizado dos operaciones con idéntico resultado: cada vez se capturaron 24 conejos sanos, liberados tras la vacunación» en la finca privada de Bréau (Seine-et-Marne), cuyo propietario dio su consentimiento, indicó el PP a AFP. De aquí al 29 de febrero están previstas seis operaciones de captura, llevadas a cabo por equipos de entre 8 y 12 tramperos bajo la supervisión del teniente de la Louveterie de París, Yves Laborde.

En total, la población de conejos salvajes en los alrededores de Les Invalides se estima en 300 pares de orejas, según el decreto firmado el 10 de enero por el prefecto de policía Laurent Núñez. «La superpoblación en el lugar conduce a una degradación de las condiciones de vida y a riesgos para la salud», estima el PP, citando la «mortalidad de los conejos y el cebo que constituyen para las ratas». Además, el coste de restauración del lugar, dañado por «la multiplicación de galerías subterráneas» y el «deterioro de los jardines, de las tuberías, de la flora» se estimó en 366.000 euros sin impuestos, según el PP.

“La zona en la que se les reintegra es un espacio de repoblación, del que no se les expulsa”, asegura la jefatura policial. La asociación Paris Animaux Zoopolis (PAZ), que afirma que «durante esta operación se sacrificarán conejos bajo el pretexto del desplazamiento», acusa al PP de «jugar a la opacidad con el método de captura». “La captura de conejos provoca un estrés intenso. Un cierto número de conejos morirán durante la captura y, potencialmente, el transporte”, añade PAZ, señalando que el municipio de Bréau alberga la sede de la Federación de Caza de Sena y Marne.