Las exportaciones de vinos y bebidas espirituosas francesas cayeron en 2023, un «aterrizaje suave» después de dos años récord, pero también «una alerta» que recuerda «la constante necesidad de adaptarse» a los consumidores, afirmó el martes la Federación de Exportadores de Vinos y Espirituosos de Francia. (FEVS). Las ventas exteriores de vinos, champagnes y coñacs franceses cayeron un 6% en 2023, hasta 16.200 millones de euros. Pero su valor había aumentado un 28% en 2021 y un 11% en 2022, lo que lleva a la FEVS a hablar de un “aterrizaje suave”.

Este sector representa el tercer sector con superávit comercial de Francia, después de la aeronáutica y la cosmética. El año 2023 estuvo marcado por una inflación elevada, que afectó a los presupuestos de los hogares, señaló Gabriel Picard, presidente de la FEVS, en un comunicado. En algunos países, particularmente en Estados Unidos, los vendedores redujeron las existencias que habían acumulado y, por lo tanto, importaron menos.

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«Este descenso es una alerta para nuestras empresas» que «nos recuerda la necesidad constante de adaptarnos a la evolución de la demanda de los consumidores y del mercado», afirmó Gabriel Picard. Hay que considerar otros tipos de vino, latas o tapones de rosca, puso como ejemplo durante una rueda de prensa. Las autoridades públicas también tienen su papel que desempeñar, en particular evitando que los mercados se cierren mediante medidas de represalia comercial, añadió, mencionando las negociaciones de acuerdos de libre comercio o disputas comerciales con Estados Unidos y China.

En cualquier caso, el aumento de los precios de las botellas exportadas ha permitido limitar la caída del volumen, que alcanzó el 10% en 2023. «Nunca habíamos exportado un volumen de vino tan bajo desde 2009», advirtió Gabriel Picard. Estados Unidos sigue siendo, con diferencia, el principal comprador de alcohol francés, incluso si sus importaciones han caído un 22% en valor.

Al Reino Unido, segundo mercado de Francia, las exportaciones se estabilizaron (1%), mientras que a China, tercer mercado, cayeron un 6%, con tendencias opuestas: -20% para los vinos pero 3% para las bebidas espirituosas, que “se benefician de la reapertura”. de lugares de consumo post-Covid”. Las exportaciones a la Unión Europea se están estabilizando, con un ligero descenso hacia Alemania (-1%) y Bélgica (-1%), pero un aumento hacia Suiza (3%) o Italia (4%).