Los combates entre el ejército y los paramilitares en Sudán durante casi cuatro meses han dejado miles de cadáveres en descomposición que hacen temer el riesgo de epidemias en este pobre país del este de África, alerta este martes 8 de agosto la ONG Save the Children.
«Miles de cadáveres se están pudriendo en las calles de Jartum mientras las morgues están abarrotadas y se enfrentan a cortes de energía», dijo Save the Children en un comunicado el martes. La guerra entre el ejército dirigido por el general Abdel Fattah al-Burhane y las Fuerzas de Apoyo Rápido (FSR) del general Mohamed Hamdane Daglo se ha cobrado ya más de 3.900 vidas, según la ONG Acled, y más de cuatro millones de desplazados y refugiados, según a una última evaluación anunciada el martes por la ONU.
«La incapacidad de ofrecer funerales dignos a los que mueren aumenta el sufrimiento de las familias en Jartum», dijo el director de salud de Save the Children, Bashit Kamal Eldin Hamid. La imposibilidad de retirar estos cadáveres a causa de los combates y la falta de energía eléctrica que ya no permite el funcionamiento del sistema de refrigeración de las morgues de la capital, exponiendo doblemente a los habitantes al riesgo de epidemias. De los 89 principales hospitales de la capital, 71 están fuera de servicio y los que siguen operativos son a menudo objeto de ataques o saqueos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha enumerado 53 ataques a instalaciones de atención médica que han causado 11 muertes desde el comienzo de la guerra el 15 de abril. Desde hace meses, las ONG insisten en que el tiempo se acaba porque las aguas estancadas de la temporada de lluvias, que comienza en junio, favorecen epidemias que van desde la malaria hasta el cólera y el dengue. Se han detectado casos de cólera y sarampión en diferentes regiones del país, advierte la OMS. En las últimas semanas, los enfrentamientos se han intensificado en Jartum, donde la fuerza aérea ha estado bombardeando zonas residenciales, apuntando a bases instaladas durante varios años por paramilitares, que están respondiendo con drones.