El empleo asalariado privado se mantuvo casi estable en el segundo trimestre en Francia con 19.700 creaciones netas de empleo, según la primera estimación publicada este viernes por el INSEE. A pesar de una desaceleración -el índice había aumentado un 0,4% en el trimestre anterior- el empleo asalariado privado superó su nivel de hace un año (1,2%) con 249.500 empleos adicionales, a pesar de un clima social tenso, marcado por protestas contra la reforma de pensiones y disturbios urbanos . Pero también tras el deterioro de la deuda francesa por parte de la agencia de calificación Fitch. En comparación con antes de la crisis sanitaria, Francia tiene 1,2 millones de puestos de trabajo más (6,2%).
En detalle, el empleo temporal volvió a caer este trimestre: 0,8% (o -6.500 puestos de trabajo) frente al -2,2% del trimestre anterior. Excluyendo el trabajo temporal, el empleo industrial creció al mismo ritmo que el trimestre anterior, con un aumento del 0,2%, o 6.400 puestos de trabajo netos creados. Ahora supera su nivel anterior a la crisis (2%), con casi 62.300 puestos de trabajo adicionales en comparación con el cierre de 2019.
En la construcción, el empleo cayó un 0,3%, o 4.800 puestos de trabajo menos. En el sector terciario comercial, el empleo se ralentiza notablemente, tras haber aumentado un 0,7% en el trimestre anterior. Con un aumento del 0,2% este trimestre, se mantiene muy por encima de su nivel anterior a la crisis: Francia tiene 899.600 puestos de trabajo más en este sector que a finales de 2019.
Del mismo modo, el empleo privado asalariado (excluidos los trabajadores temporales) en el sector terciario de no mercado también muestra una desaceleración, con solo un aumento del 0,1% en el segundo trimestre de 2023 cuando aumentó un 0,5% en el trimestre anterior.
