Le Figaro Niza
¿El policlínico Saint-Jean de Cagnes-sur-Mer (Alpes-Maritimes) se negó a hacerse cargo de Marine Lloris, la esposa de Hugo Lloris, el excapitán de la selección francesa de fútbol? En cualquier caso, así lo denunció en su cuenta de Instagram, el viernes, en una efímera publicación. La esposa del portero de Niza, nacido en Cagnes-sur-Mer, se indignó por la actitud de los cuidadores hacia ella cuando llegó, en la noche del jueves al viernes.
Cerca de la medianoche acudió al servicio de urgencias de este establecimiento privado por “una alergia grave que se estaba extendiendo rápidamente”, describe. “Pero se negaron a atenderme, continúa categórica. Dos enfermeras me trataron con desprecio y me hablaron con arrogancia porque yo no tenía ningún negocio sin un número de seguro social. (La pareja Lloris vive en Londres, nota del editor)»
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La compañera del internacional francés se desarrolla y detalla que no ha sido, según ella, apoyada por consideraciones económicas. Ante la ausencia de una secretaria nocturna, y “por temor a que no me paguen, me pidieron que saliera del local sin ni siquiera revisar mi estado de salud”, indicó.
Contactado por Le Figaro, el policlínico Saint-Jean, a través de la voz de su presidenta y directora general, Alexandra Cittadini, evacua esta polémica y habla de “no evento”. Explica que realizó investigaciones a raíz de las reprimendas de Marine Lloris retransmitidas en las redes sociales. “La noche del jueves, alrededor de la medianoche, ya había doce pacientes, incluidos cinco en situación inestable y uno en estado crítico, precisa el director. Se le dijo a la Sra. Lloris que no podía ser atendida de inmediato y que no deseaba esperar. Así que ella se fue».
El presidente del establecimiento evoca “un trabajo de regulación de los pacientes según los criterios de gravedad”. Los de Marine Lloris, esa tarde, eran menos que el resto de personas a las que atender los equipos médicos. “Y no es un problema de Vitale o de la tarjeta financiera, llevamos a todos, incluso a las personas que vienen en traje de baño y sin papeles en ese momento”, agrega Alexandra Cittadini. También informa que la hermana de Marine Lloris, que la acompañaba, fue «bastante vehemente con el personal, aunque ahora están capacitados para enfrentar esto». La clínica tiene aproximadamente 32.000 visitas al año.
Siempre en sus redes sociales, Marine Lloris contagia su decepción. “Por primera vez no me sentí en mi lugar en mi país, en la ciudad donde nací, afirmó. En fin, estoy impactada por lo que viví.” “Entiendo que ella no quiso esperar, responde Alexandra Cittadini. Pero trabajamos así, teniendo en cuenta los criterios de gravedad. Marine Lloris residía en la Costa Azul de vacaciones.