Es una pequeña victoria para el campo presidencial. Y una amarga derrota para los opositores a la reforma de las pensiones. En la Comisión de Asuntos Sociales, este miércoles, el artículo 1 del proyecto de ley del grupo Liot (Libertades, Independientes, Ultramar y Territorios), destinado a derogar la jubilación a los 64 años, fue rechazado tras la votación de una enmienda de supresión por la mayoría de los parlamentarios presentes. La maniobra, organizada por el campo macronista durante varios días, funcionó bien.

Para que esto tuviera éxito, el grupo LR había “asegurado” notablemente dos de sus votos. La diputada LR Justine Gruet, que votó a favor de la moción de censura contra el ejecutivo hace unas semanas, fue sustituida por Véronique Louwagie, que apoya el aplazamiento de la mayoría de edad. Mientras que Anne-Laure Blin, otra representante electa a favor de la reforma, se sentó en lugar de su colega Thibault Bazin. El plan puesto en marcha por las tropas presidenciales para derrotar el proyecto de ley de derogación del grupo Liot avanza, por lo tanto, según lo previsto por el momento, ya que el texto ha sido vaciado de contenido.

Si su examen llega a su fin en comisión, los opositores a la reforma deberán entonces añadir la derogación de la jubilación a los 64 años mediante una enmienda antes del examen en sesión pública del 8 de junio. La Presidenta de la Asamblea Nacional, Yaël Braun-Pivet, podrá entonces convocar nuevamente a la oficina de la institución que esta vez podrá pronunciar «la inadmisibilidad» de esta propuesta bajo el « Artículo 40», que prevé que un la ley que emana de los parlamentarios no puede degradar las finanzas públicas.

Pero el caso está lejos de ganarse. Los diputados de Nupes, y en particular los de La France insoumise, han presentado desde entonces cientos de subenmiendas. Objetivo ? Obstruccionismo para que el examen del texto no termine en comisión. Así, sería el texto inicial, incluyendo el artículo 1 que apunta a abolir la jubilación a los 64 años, que llegaría a sesión pública el 8 de junio. En este caso, para bloquear una posible adopción del texto, el presidente de la Asamblea Nacional debería entonces convocar un despacho excepcional en el que el campo presidencial -en mayoría en este cenáculo- podría entonces pronunciar «inadmisibilidad». Si la primera ronda de este «partido» fue ganada por el campo macronista, el juego aún está lejos de ganarse.