El progreso tecnológico no puede disociarse de la imaginación que transmite. El presidente y director ejecutivo de Alphabet, empresa matriz de Google, el indio-estadounidense Sundar Pichai, sabe algo al respecto. Cuando toma su pluma para defender su visión de la inteligencia artificial en el Financial Times esta semana, naturalmente comienza señalando que “este año, la inteligencia artificial generativa ha capturado la imaginación de todo el mundo”. Una referencia apenas velada a la herramienta ChatGPT, que alcanzó la marca de los 100 millones de usuarios en solo 60 días. Una adopción relámpago que nunca se había observado para ninguna otra aplicación en el pasado.
El aspecto revolucionario de esta tecnología lo subraya el CEO de Alphabet, quien presenta la inteligencia artificial en sentido amplio como “la tecnología más profunda sobre la que trabaja la humanidad en la actualidad”. Sundar Pichai va más allá al defender que sus aplicaciones concretas constituyen “una oportunidad única para que el mundo alcance sus objetivos climáticos, construya un crecimiento sostenible, mantenga la competitividad global y mucho más”.
Pese a esta oleada de optimismo, el líder de Google reconoce que las tecnologías de inteligencia artificial “afectarán a todos los sectores de actividad y a todos los aspectos de la vida”. Pero el egresado de Stanford, lejos de preocuparse por ello, muestra su entusiasmo. “Cuantas más personas trabajen para promover la IA, mejor será en términos de ampliar las oportunidades para las comunidades en todas partes”, cree.
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Este llamado a desarrollar aún más la inteligencia artificial va en contra de las posiciones recientes de varios investigadores y empresarios del sector tecnológico, incluido el famoso Elon Musk, con el objetivo de «tomarse un descanso de al menos seis meses» en la «carrera descontrolada» por la inteligencia artificial. Este último presenta «riesgos profundos para la sociedad y la humanidad», explicaron los firmantes. El líder de Google lamenta esta posición. “Mientras algunos han intentado reducir este momento a una simple carrera por la IA, nosotros creemos que es mucho más que eso”, les responde, antes de invitar a todos los actores a comprometerse en “la carrera por crear una IA responsable”.
Para mostrar el camino, Sundar Pichai desarrolla los tres ejes seguidos por Alphabet para desarrollar lo que él llama «IA responsable». Primero, “hacer que la IA sea útil para todos”, citando el ejemplo del servicio de orientación de Google Maps, o el servicio de predicción de inundaciones Flood Hub, o las aplicaciones científicas en el sector de la salud desarrolladas por GoogleDeepMind y AlphaFold. En segundo lugar, la implementación de reglas internas recopiladas en los «Principios de IA» de Google que datan de 2018. Finalmente, regulaciones externas elaboradas por autoridades políticas.
Es este último aspecto el que explica, además, la posición adoptada por el jefe de Google en el diario económico británico. Los funcionarios europeos están trabajando actualmente en la legislación sobre inteligencia artificial, que tendrá profundos efectos en el desarrollo de esta tecnología en Occidente. “Estados Unidos y Europa son aliados y socios estratégicos. Es importante que trabajen juntos para crear marcos sólidos y favorables a la innovación para la tecnología emergente, basados en valores y objetivos comunes”, escribe Sundar Pichai. Y para firmar su texto señalando que “estamos sólo al principio”.
