El gobierno español defendió el viernes a la agencia meteorológica nacional, blanco de una avalancha de insultos y amenazas en un contexto de «conspiración» climática, mientras el país enfrenta temperaturas anormalmente altas y una sequía récord.
“Asesinos”, “delincuentes”, “os estamos vigilando”, “lo pagaréis”: este es el tipo de mensajes que la agencia pública Aemet asegura haber recibido en las últimas semanas de personas anónimas, en las redes sociales, por correo electrónico o incluso por teléfono.
Amenazas vinculadas a las previsiones y análisis publicados por la agencia, y en particular a las relativas a la ola de calor especialmente temprana vivida la semana pasada cuando el jueves se batió un récord absoluto de calor en el mes de abril en la España peninsular con 38,8 grados centígrados en Córdoba ( sur).
En defensa del organismo, la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, llamó este viernes a «decir alto» a este tipo de prácticas. «Mentir, alimentar la conspiración y el miedo, insultar… Esto empobrece a nuestra sociedad», denunció en su cuenta de Twitter.
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En un vídeo subido el 20 de abril a Twitter, la Aemet ya había denunciado un recrudecimiento de la violencia en las redes sociales, pidiendo «respeto» para sus agentes. «Respetamos la libertad de expresión» pero «no podemos permitirnos todo», advirtió.
Entrevistada este jueves por el diario El Diario, una de las portavoces de la agencia, Estrella Gutiérrez, también miembro del Consejo Superior de Meteorólogos de España, dijo que «nunca» había experimentado tal nivel de agresividad en treinta años de carrera.
“Somos un servicio público esencial, contamos con personal altamente calificado y experto, y por eso seguimos trabajando con esa profesionalidad”, insiste el meteorólogo, denunciando la avalancha de información falsa y negación climática en las redes sociales.
“El cambio climático es real. El último informe del IPCC, y de otros organismos anteriores, concluye que el cambio climático nos está trayendo episodios de temperaturas más altas, que estamos viendo actualmente”, insiste.
País europeo en primera línea frente al calentamiento global, España vive desde hace varios años un aumento de las olas de calor, con precipitaciones cada vez más escasas e irregulares. Según la ONU, el 75% del país enfrenta riesgo de desertificación.
