Tres gendarmes dijeron el miércoles 26 de abril que los disparos de Terry Dupin no estaban bajo control y podrían haberles alcanzado, en el segundo día del juicio al «loco de Dordoña» que había asegurado, el día anterior, que no había querido » hacer ningún daño a nadie. Juzgado hasta el jueves en Périgueux por haber agredido violentamente a su expareja y a su nueva compañera en mayo de 2021, el prófugo había escapado durante 36 horas de los 300 gendarmes movilizados y multiplicado los disparos de fusil en su dirección.
Este martes, Terry Dupin reconoció estos disparos pero sostuvo que no había apuntado directamente a los gendarmes, explicando que quería «que tomaran represalias y (los) mataran», al no tener «el coraje» de suicidarse. “Como exsoldado, te puedo decir que disparó al azar”, dijo el miércoles en el bar un sargento de la brigada de Terrasson, exlegionario. Este gendarme no cree en un “suicidio policial”: “Me da risa. ¿Por qué se escondió y camufló entonces?» «Nuestro sentimiento para todos es que nos iba a disparar», dijo otro gendarme de la brigada de Terrasson.
«Para hacer un tiro de precisión, hay toda una serie de parámetros que no se cumplieron» para Terry Dupin, en particular el hecho de «estar en constante movimiento», argumentó el comandante de la gendarmería de Sarlat, quien «se sintió en peligro». durante esta intervención. «El uso de un arma no se olvida, es como andar en bicicleta», respondió el acusado, exsoldado del regimiento de infantería de Brive. Inicialmente procesado por intento de asesinato, escapó del Tribunal Penal «en ausencia de certeza sobre su intención homicida», según la fiscalía. Procesado en correccional por violencia voluntaria agravada, incurre en 14 años de prisión y 200.000 euros multa.
Previamente, el tribunal escuchó a la pareja efímera del excónyuge, quien declaró, con voz temblorosa, haber visto «pasar su vida ante (él)». Terry Dupin lo había golpeado en la cabeza con el trasero, antes de dispararle entre las piernas. “Casi me muero”, aseguró este hombre. “Llevo dos años viviendo una pesadilla. He perdido la confianza en mí mismo y ya no me siento seguro”, lamentó. El juicio debe terminar el jueves con las solicitudes de la fiscalía, los alegatos de la defensa y la deliberación.