Cambio de vestuario: invitado sorpresa la temporada pasada, el AS Monaco se acerca a los cuartos de final de la Euroliga de baloncesto, desde el martes (20:15 horas) contra el Maccabi Tel Aviv, en la piel del favorito para llevar a Francia de vuelta a la última plaza tras más de 25 años de espera. El ambicioso club Rock, en trayectoria ascendente desde hace diez años y su toma de poder por el empresario ucraniano Sergey Dyadechko, había caído en 2022 tras el quinto y último partido, en el electrizante ambiente del Pireo ante el ‘Olympiacos (94-88), tras llegando a los play-offs in extremis.
Así, para permitir que el ‘Roca Team’ dé un nuevo paso y participe en la Final Four de la Euroliga, algo que ningún club del campeonato francés ha hecho desde 1997 (Asvel), el ruso naturalizado húngaro Aleksej Fedoricsev, presidente y accionista mayoritario desde enero de 2022, ha decidido trabajar el doble. El presupuesto se ha incrementado esta temporada casi un 50% hasta alcanzar los 20,7 millones de euros, algo inédito en Francia, y la plantilla se ha visto reforzada por Elie Okobo (MVP de la última final del campeonato francés con el Asvel), Jordan Loyd (ex-Zénith San Petersburgo) o el extremo fuerte John Brown III (Kazan).
Resultado: ASM tendrá esta vez la ventaja del campo en caso de un partido de apoyo, debido a su cuarto lugar en la temporada regular después de ocupar el top 4 casi continuamente. Esto podría pesar en contra del Maccabi, el mejor equipo de los ocho clasificados en casa (sólo dos derrotas en 17 partidos) pero más flojo fuera (cinco aciertos).
El club israelí, que acabó la temporada a golpe de cañón (siete victorias en los últimos ocho partidos), también puso grandes recursos sobre la mesa el verano pasado para recuperar su glorioso pasado (seis títulos de Euroliga). Un triplete estadounidense ha aterrizado así a orillas del Mediterráneo: el base Lorenzo Brown (16,5 pts por partido de media esta temporada), campeón de Europa con España en 2022, el base Wade Baldwin (36 partidos NBA, 16,7 pts) y extremo o fuerte extremo Bonzie Colson, MVP del campeonato de Francia en 2020-2021 con Estrasburgo.
Para sacar ventaja antes del segundo partido, el jueves todavía en casa, el Mónaco, el peor equipo de la Euroliga por tres puntos, se apoyará de su lado en su impacto atlético por dentro (primero en cuanto a rebotes ofensivos tomados) y su » Factor X» Mike James, sexto mejor anotador de la competición (16,3 pts). Este último ha vivido los últimos meses atormentados, entre derramamiento de sangre sobre el terreno y una suspensión de dos semanas, en marzo, «por violación de las normas internas» del equipo. Quien trabajó bien durante su ausencia.
“Tendremos la mejor versión de él. Tiene un instinto asesino. Es un gran líder, aporta mucha energía. De eso no tengo ninguna duda”, aseguró el lunes a la prensa John Brown, uno de los hombres fuertes del interior. James anotó este sábado 20 puntos en la final de la Copa de Francia ante el Asvel (90-70), el primer trofeo de la ASM desde la Eurocopa de 2021, que le había permitido pisar la Euroliga.
La victoria en Bercy se celebró muy a la ligera, según John Brown: “Es importante, pero no pudimos aprovecharlo mucho porque la Euroliga ya está ahí. Y queremos empezarlo de la mejor manera”. “Vamos a darlo todo, añadió. Sabemos que el escenario (del Maccabi) será superior a todo lo que hemos hecho esta temporada. Pero todavía no estamos donde queremos estar».
Bien en esta última plaza no frecuentada por un representante de Francia desde hace más de un cuarto de siglo, época en la que el Mónaco vegetaba en las divisiones inferiores, muy lejos de la Euroliga.