La agencia regional de salud (ARS) de Île-de-France recomendó el miércoles no consumir huevos y «productos animales de producción doméstica no controlada», en toda la región, debido a una «contaminación» con «contaminantes orgánicos persistentes». «El consumo regular de alimentos contaminados con dioxinas y PCB conduce a una impregnación gradual del cuerpo que puede tener efectos en la salud a largo plazo», dijo la ARS en un comunicado de prensa.
La agencia realizó un estudio regional del «contenido de contaminantes orgánicos persistentes» en los huevos de 25 gallineros domésticos en Ile-de-France, después de una «alerta sobre la concentración de dioxinas en huevos no comercializados» de gallineros ubicados cerca la incineradora de residuos de Ivry-sur-Seine. Catorce de los gallineros analizados están ubicados cerca de las tres principales incineradoras de la región de París (Ivry-sur-Seine, Issy-Les-Moulineaux, Saint-Ouen), especifica la ARS.
Los resultados de este estudio “muestran contaminación de todas las muestras por las tres familias de contaminantes orgánicos persistentes analizadas (dioxinas, furanos y PCBs)”, indica la nota de prensa. Esto significa que estos contaminantes están presentes «en todo el entorno urbano, y no específicamente alrededor de los incineradores», advierte la ARS.
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La agencia señala que de los 25 gallineros analizados, «dos tienen niveles particularmente altos» de PCB en los huevos, superando entre 40 y 50 veces «los umbrales normativos europeos para los huevos comercializados». Estos dos sitios están ubicados a más de 3 km de una incineradora, agrega la ARS.
Entre los riesgos para la salud vinculados al consumo de estos productos, la ARS enumera un riesgo «aumentado» de cáncer, «trastornos de la fertilidad y el embarazo», así como diabetes y «efectos disruptores endocrinos». “No existe un tratamiento para eliminar estas sustancias del organismo”, advierte, y precisa que la “principal medida de prevención” era evitar “el consumo de los productos alimenticios más contaminados”.