Alexander Ceferin, que era el único candidato, fue reelegido por aclamación como Presidente de la UEFA para un tercer mandato de cuatro años en el Congreso del organismo el miércoles en Lisboa.
El esloveno (55) asumió al frente de la Confederación Europea en 2016 tras la suspensión de Michel Platini y fue reelegido en 2019.
Abogado de formación y poco conocido a su llegada a lo más alto de la UEFA, el exjefe de la Federación Eslovena (2011-2016) supo imponerse, en particular oponiéndose frontalmente a su homólogo de la Fifa Gianni Infantino sobre el proyecto, finalmente abandonado, de un Mundial cada dos años defendido por los suizos.
Sobre todo, supo salir airoso del temporal provocado en 2021 por varios grandes clubes europeos que se habían embarcado en la aventura de una Superliga cerrada. El proyecto inicial fue abandonado por sus promotores pero la batalla aún no ha terminado para la UEFA.
Tres clubes (Real Madrid, FC Barcelona y Juventus de Turín) siguen resistiendo y han acudido al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) denunciando un supuesto abuso de posición dominante por parte de la UEFA.
La decisión se espera para las próximas semanas pero el Abogado General del TJUE, cuyas conclusiones son seguidas con frecuencia por los jueces, emitió a mediados de diciembre un primer dictamen favorable a la Confederación Europea.
A22 Sports Management, la empresa promotora de la Superliga, también presentó a principios de febrero una nueva versión de su proyecto, con una competición que quiere ser más “abierta”, incluyendo “varias divisiones” y “con 60 u 80 equipos”.
Poco antes de su reelección, Ceferin atacó duramente a la Superliga desde el podio del Congreso.
«Afortunadamente, la vergüenza nunca mató a nadie», dijo. En pocos meses, la Superliga se ha convertido en una fábula de Caperucita Roja. Es el lobo que se disfraza de abuela para devorarte mejor. Pero nadie se deja engañar”.
Envuelto en una fase de relajación con Infantino, Ceferin tiene ahora las manos libres para llevar a cabo sus dos grandes proyectos del momento: la reforma del fair play financiero (con la introducción de una especie de tope salarial, indemnizaciones por traspasos y comisiones pagadas a los agentes ) y la nueva fórmula de la Champions League, que pasará de 32 a 36 equipos a partir de la temporada 2024/25 con una primera fase organizada en forma de minicampeonato. Los derechos televisivos de esta competición ya se han adjudicado por la suma récord de 15.000 millones de euros en tres años (2024-2027).
Ceferin también ha planteado recientemente la posibilidad de revisar las reglas sobre la propiedad fraccionada de clubes que prohíben a los inversores ser propietarios de varios clubes que participan en el mismo evento.
