Fue la primera entrevista radiofónica con el nuevo secretario general de la CGT, elegido el pasado viernes para el cargo que ocupa desde hace más de ocho años Philippe Martínez. La oportunidad para que Sophie Binet muestre su determinación de que el gobierno retire definitivamente la reforma de las pensiones. “No hay otra salida a la crisis que no sea la retirada”, dijo a France Inter el lunes por la mañana, y agregó que ese es el mandato que le dio el congreso de la CGT.

La primera mujer elegida al frente de la CGT pretende inculcar el mensaje a la primera ministra Elisabeth Borne, con quien se reunirá el miércoles junto a los demás líderes de la intersindical. “No podemos hablar de otros temas hasta que retiremos esta reforma”, advirtió Sophie Binet. Antes de lanzar un ultimátum al Gobierno: éste, según ella, «debe entender que hoy no es posible dirigir el país si no retiramos esta reforma».

Preguntada por la propuesta de moratoria de varios meses formulada por Laurent Berger, Sophie Binet consideró que “[no] creía en la ruptura”. «Cuando suspendes, te retiras», dijo, recordando que la ley sobre el primer contrato de trabajo (CPE), de 2006, había terminado nunca aplicándose a pesar de su aprobación en el Parlamento. La movilización contra el CPE fue también su primera gran lucha sindical, cuando ella era miembro del sindicato estudiantil Unef en ese momento. Fiel a la línea de Philippe Martínez, el nuevo n° 1 de la CGT declaró querer preservar la unidad de la intersindical.

La elección de Sophie Binet fue una sorpresa en un contexto de fuerte oposición dentro de la central sindical que se consideraba cercana al Partido Comunista. La nueva secretaria general aseguró que no tenía “ningún oponente en la CGT”, luego puso en perspectiva estas disensiones: “Es un debate colectivo, vemos que los votos son muy grandes y que hemos logrado tener una organización unida. Sobre el carácter inédito del nombramiento de una mujer para este cargo, Sophie Binet no negó el «mensaje muy fuerte para las mujeres trabajadoras», al tiempo que dijo que no quería ser «el árbol que esconde el bosque».