Un inspector ferroviario griego fue acusado y puesto bajo custodia el viernes más de un mes después del desastre del tren que mató a 57 personas en el centro de Grecia, supimos de una fuente judicial.

Este inspector de jefes de estación que se encontraba de servicio durante este accidente, fue acusado de “alteración de la seguridad del tráfico” al haber provocado la muerte de numerosas personas, según la misma fuente. Es el segundo empleado ferroviario en ser acusado. El primer sospechoso, el jefe de estación de turno en el momento del accidente, fue imputado por el mismo cargo y puesto en prisión preventiva una semana después de esta tragedia que sacudió al país.