El ministro de Relaciones Exteriores de Estados Unidos, Antony Blinken, denunció el miércoles la adopción de una ley contra la homosexualidad en Uganda y pidió que no se implemente.
“Hacemos un llamado enérgico al gobierno de Uganda para que reconsidere la implementación de esta ley”, dijo el secretario de Estado de EE. UU. en un tuit, y destacó que esta ley “desafía los derechos fundamentales de todos los ugandeses” y “podría afectar la lucha contra el sida”. .
El parlamento de Uganda votó el martes por la noche una ley que prevé severas penas para las personas que tengan relaciones sexuales con personas del mismo sexo, en un país donde la homosexualidad ya es ilegal. La ley debe presentarse al presidente Yoweri Museveni, quien puede promulgarla o vetarla.
Uganda tiene una estricta legislación contra la homosexualidad, un legado de las leyes coloniales británicas, pero desde su independencia del Reino Unido en 1962 no ha habido procesamientos por actos homosexuales consentidos.
