Multas, a puerta cerrada o retirada de puntos: la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) ha incluido sanciones en el reglamento de sus competiciones para los clubes cuyos seguidores sean culpables de actos de racismo, informaron este martes medios locales.
Estas sanciones se aplicarán esta temporada en todos los torneos masculinos y femeninos, tanto en la élite como en las divisiones inferiores.
Si se comprueba un primer caso de racismo en las gradas, el club deberá pagar una multa, según el reglamento presentado este martes en un congreso de la CBF en Río de Janeiro.
En caso de una primera reincidencia, el equipo deberá jugar un partido a puerta cerrada o en terreno neutral. Y la próxima vez será castigada con la pérdida de puntos en la clasificación, según el sitio Globoesporte.
Anteriormente, el reglamento solo requería que los clubes, su personal y los jugadores “cooperaran para evitar comportamientos antideportivos”, incluido el racismo, pero las sanciones previstas rara vez se aplicaban.
Uno de los principales responsables de este cambio es Ednaldo Rodrigues, el primer presidente negro de la CBF, quien ha hecho de la lucha contra el racismo una prioridad de su mandato, que comenzó en marzo de 2022.
Hace dos semanas envió una carta reclamando más firmeza a organismos internacionales como la Fifa, la UEFA o la Conmebol contra el racismo, del que Vinicius, estrella de la Seleçao y el Real Madrid es víctima en España.