Los rebeldes hutíes yemeníes se atribuyeron la madrugada del viernes 19 de enero en un comunicado de prensa la responsabilidad de los ataques contra un barco estadounidense que circulaba en el golfo de Adén. “Las fuerzas navales de las fuerzas armadas yemeníes (nombre dado al brazo armado de los hutíes, nota del editor) llevaron a cabo una operación selectiva contra un barco estadounidense, el Chem Ranger, en el Golfo de Adén con varios misiles navales, varios de que alcanzó su objetivo”, dijeron en un comunicado. Según el sitio especializado Marine Traffic, el Chem Ranger es un petrolero con pabellón de las Islas Marshall que se encuentra frente a las costas de Yemen en los últimos días. La tripulación del barco «vio los misiles impactar en el agua cerca del barco» y «no hubo informes de heridos o daños» mientras el barco «continuaba su camino», escribió el comando militar estadounidense en Medio Oriente (Centcom) en X ( anteriormente Twitter).

«Una respuesta a los ataques estadounidenses y británicos es inevitable, cualquier agresión adicional será castigada», dijeron los rebeldes yemeníes, afirmando que sólo atacan a los barcos que se dirigen a Israel «mientras no haya un alto el fuego y no se levante el asedio a Gaza». Estados Unidos atacó sitios hutíes en Yemen por quinta vez el jueves, en respuesta a los ataques del grupo respaldado por Irán a buques mercantes en el Mar Rojo, una zona crucial para el comercio internacional. Se trata de la segunda salva de bombardeos estadounidenses en menos de 24 horas contra misiles hutíes, incluidos el miércoles por Washington en una de sus listas de «organizaciones terroristas». El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo que tales ataques continuarían mientras los hutíes interrumpan el comercio marítimo internacional frente a Yemen.

Este grupo respaldado por Irán ha atacado decenas de buques mercantes que considera «vinculados a Israel» en el Mar Rojo y el Golfo de Adén desde el inicio de la guerra entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás en la Franja de Gaza. Estos ataques, que según dicen se llevan a cabo por solidaridad con el territorio palestino, han obligado a muchos armadores a suspender el paso de sus flotas por el Mar Rojo.