Le Figaro Marsella
El macabro hallazgo recuerda el caso de la desaparición del pequeño Émile, cuyos restos fueron denunciados a las autoridades por un excursionista a finales de marzo. Este miércoles 8 de mayo se encontraron huesos humanos cerca de una capilla en Aix-en-Provence, según informó BFMTV y confirmaron a Le Figaro fuentes policiales y judiciales.
Según estas fuentes, fue el responsable del lugar de culto, la capilla de Santa Ana, quien descubrió los huesos antes de informar a la policía. En total, dos cráneos, una mano y un antebrazo fueron encontrados por el hombre en una bolsa colocada cerca del edificio, situado en Pinchinats, una pedanía rural situada al noreste de la ciudad. Interrogado por la policía, el responsable no pudo explicar la presencia de estos huesos, y menos aún dar la identidad del o los responsables de este extraño depósito.
Contactado, el fiscal de Aix-en-Provence, Jean-Luc Blachon, indicó que la fiscalía había abierto una investigación para «buscar las causas de la muerte», que había confiado las investigaciones a las fuerzas de policía locales. Los huesos fueron incautados para someterse a numerosos exámenes técnicos, así como a peritajes químicos, genéticos y antropológicos con el fin de datarlos.
Según el fiscal, estos restos podrían ser antiguos, desprovistos de carne y piel y “blanqueados por el tiempo”. También continúan las investigaciones para tratar de comprender las circunstancias y motivaciones de tal presentación.