(Buenos Aires) La policía antidisturbios de Argentina dispersó a manifestantes usando cañones de agua afuera del Congreso el miércoles, aumentando las tensiones antes de que los legisladores voten sobre la reforma estatal y los proyectos de ley tributarios propuestos por el presidente Javier Milei.
Los oponentes políticos del libertario Milei, poderosos sindicatos y miles de manifestantes comenzaron a converger en el Congreso el miércoles por la mañana, cuando el Senado abrió el debate sobre una legislación clave.
Los manifestantes instaron a los senadores a rechazar la agenda de Milei de dura austeridad y desregulación económica. Cientos de policías respaldados por vehículos blindados equipados con cañones de agua bloquearon la carretera frente a la plaza de la ciudad de Buenos Aires, la capital del país. Los manifestantes chocaron contra la cadena de policías.
La votación es la prueba más seria hasta ahora para la visión del líder libertario sobre la gobernanza y el cambio.
Milei llegó al poder prometiendo que resolvería la peor crisis económica de Argentina en dos décadas. Pero su incipiente partido político tiene sólo una pequeña minoría de escaños en el Congreso y ha tenido dificultades para llegar a acuerdos con la oposición.
Esta versión suavizada todavía delega amplios poderes legislativos al presidente sobre energía, pensiones y seguridad, e incluye medidas para fomentar la inversión, desregular la economía y reducir el déficit.
Algunas cuestiones delicadas, como la toma sindical de la atención sanitaria y la privatización de la compañía petrolera nacional de Argentina, fueron abandonadas con la esperanza de llegar a un compromiso.