Una semana después del descubrimiento de un bebé recién nacido encontrado vivo en un cubo de basura en Rennes, el contexto de esta tragedia se vuelve más claro. Bajo custodia policial, su madre, una joven de 17 años, admitió haberse librado de él poco después de su nacimiento, según supo Le Figaro por la fiscalía de Rennes.
Esta estudiante de secundaria, nacida en Mayotte y desconocida ante los tribunales, “dijo durante sus audiencias que sabía que estaba embarazada desde hacía varios meses y admitió que, después de dar a luz en su habitación, había metido al bebé en una bolsa de plástico y luego en una bolsa de basura que luego metió en el contenedor de basura cerca de su casa”, explica el fiscal Philippe Astruc. Al finalizar sus 48 horas de detención policial, la madre del bebé será presentada este sábado ante un juez con miras a abrir una investigación judicial por “tentativa de asesinato” y su imputación.
Un joven de 24 años, también nacido en Mayotte e identificado como el padre del niño, admitió haber mantenido relaciones sexuales durante el año 2023 con esta joven. Una vez puesto bajo custodia policial, finalmente fue puesto en libertad sin procesamiento. Las investigaciones “permitieron comprobar que este hombre de 24 años se encontraba en su lugar de trabajo en el momento de los hechos”, subraya el fiscal.
Su bebé sufre una fractura de cráneo cuyo origen aún no se ha establecido. Este pequeño, que pesaba 3.370 kg y medía aproximadamente 50 cm en el momento de su nacimiento, está desde entonces confiado al Consejo Departamental de Ille-et-Vilaine. Se debe nombrar un juez de menores para decidir su futuro.
