Selma* tenía 16 años cuando su tío de 33 se casó con ella, la aisló, abusó de ella y la agredió más de 1.000 veces. Quedó embarazada de su torturador y tuvo dos hijas, a las que él también violó cuando eran niñas. Acaba de ser condenado a 13 años de prisión.

“Su padre le robó su juventud y su inocencia”, afirmó el juez Dannie Leblanc, del Tribunal de Quebec, sobre una de las hijas del hombre, al final de la audiencia en el tribunal de Longueuil.

La Corona pedía una condena de 15 años contra el hombre, a quien la ley nos prohíbe identificar para proteger la identidad de sus víctimas. La defensa exigió 8. Quedó en libertad a la espera de su sentencia. Los crímenes tuvieron lugar durante un período de más de 16 años. El fiscal Bruno Des Lauriers se declaró satisfecho con la sentencia dictada. “Admiro la valentía de las víctimas”, dijo al final de la audiencia.

La sobrina del hombre, Selma, que no puede ser identificada, es de África. Se exilió en Francia para estudiar con su hermana, pero en 2001 se enteró de que estaba embarazada. A los 16 años, Selma quedó al cuidado de su abuela en Quebec y tuvo un aborto.

En ese momento, sus padres se negaron a permitirle regresar a Francia porque “traería deshonra” a su familia. Fue entonces cuando cayó bajo el yugo de su tío. Él comienza a atacarla en este momento. Tras una reunión familiar, Selma y su verdugo parten hacia el norte de Quebec. Tienen sexo todos los días.

“Se sentía cautiva, asustada, sin saber adónde ir”, dijo la juez en su veredicto.

En este momento, Selma es prisionera de su tío, quien frecuentemente la agrede y la controla. Le niega todo contacto con el mundo exterior y vigila todos sus movimientos. “Él ejercía un control total sobre ella”, argumentó el magistrado.

Selma intentó escapar descalza en medio del frío, pero fue atrapada por su tío, quien amenazó con matarla y «cortarla en pedacitos».

Durante las numerosas relaciones sexuales, la víctima queda embarazada varias veces. “Terminó perdiendo el feto luego de tomar un cóctel de aspirina y Coca-Cola, por sugerencia del acusado. » Una táctica que funciona “en algunas ocasiones”, según el juez.

Después de numerosos abortos espontáneos, Selma y su tío tuvieron dos hijas. La “pareja” se instaló en La Prairie, en la costa sur de Montreal. “Formaron una familia aparentemente normal”, subrayó el magistrado en el veredicto de culpabilidad.

A lo largo de los años, agredió varias veces a sus dos hijas. “Le ofrecía golosinas a cambio de actos sexuales”, mencionó la jueza en su decisión, respecto de una de las víctimas.

Al finalizar el sexto año de escuela primaria, la hija menor, que entonces tenía 12 años, escribió una carta a su madre denunciando a su padre. Esto es lo que empuja a Selma a huir a un refugio con sus dos hijos.

El delincuente, que no es ciudadano canadiense, será devuelto a su país natal al finalizar la sentencia, dijo el juez.

*Nombre ficticio