En un partido cerrado, desordenado y comprometido, La Rochelle perdió ante el Leinster (9-16) en su entrada a la competición este domingo. Un revés que pone fin a una racha de 16 victorias consecutivas en la Copa de Campeones. Hastoy anotó tres penales mientras que los irlandeses se proclamaron reina gracias a Larmour (12º). El pie de Byrne y luego Frawley remató el trabajo.
Probablemente marcados por sus tres derrotas consecutivas ante los Maritimes (2021, 2022, 2023), los irlandeses mostraron una gran agresividad durante todo el encuentro. Apuntando a Skelton, los irlandeses aumentaron la presión desde los primeros minutos. El árbitro del partido aprovechó para calmar los ánimos con dos tarjetas amarillas, una a cada lado, para Danty y McCarthy (12º).
Los Leisntermen aprovecharon la oportunidad para marcar el único try de este partido mediante un desplazamiento en el lado cerrado finalizado por Larmour (13º). Continuando con su comienzo de temporada desigual en el Top 14 (sólo noveno, con cinco derrotas en nueve días), los hombres de Ronan O’Gara parecían sin ideas con el balón en la mano.
La lluvia, que cayó a cántaros durante el primer acto, no propició iniciativas. Los delanteros de La Rochelle intentaron marcar la diferencia mediante balones llevados, multiplicando los toques penales, en zonas sin embargo accesibles a la bota de Hastoy.
Demasiado indisciplinados e imprecisos con el balón en la mano, los Maritimes ya no volvieron a ponerse por delante en el marcador y vieron a Frawley ampliar la brecha al final del partido con un tiro largo de 60 metros (80º, 9-16).
Para el club Caravelle, este revés es una mala noticia antes de iniciar una agenda especialmente ocupada, entre un viaje a Sudáfrica, a Ciudad del Cabo, para enfrentarse a los Stormers la próxima semana, y luego, en el Top 14, dos choques contra el Stade Français y el Stade Toulousain. .
En su primer partido con la provincia irlandesa, Jacques Nienaber, ex entrenador de los campeones del mundo Springboks, logró un prestigioso éxito.