Un informe pericial, que se presentará al Gobierno el martes, recomienda prohibir el uso de pantallas a los niños menores de tres años y de teléfonos móviles a los menores de 11 años, limitando estrictamente el acceso en los años siguientes a los adolescentes. En este informe, publicado el lunes por la tarde por varios diarios regionales, la comisión de expertos encargada especialmente por el ejecutivo advierte sobre «la realidad de la hiperconexión que experimentan los niños» y «las consecuencias para su salud, su desarrollo, su futuro», pero también para el futuro “de nuestra sociedad, de nuestra civilización”.
La comisión explica que quedó “conmocionada” por “las estrategias para captar la atención de los niños”. «Ha surgido un consenso muy claro sobre los efectos negativos, directos e indirectos, de las pantallas», en particular sobre «el sueño, el sedentarismo -que favorece la obesidad- o incluso la miopía», escribe en este informe, citado en La Voix du Norte. Los expertos señalan las redes sociales como un «factor de riesgo» de depresión o ansiedad, en casos de «vulnerabilidad preexistente». Además, «el nivel de exposición de los niños» a contenidos pornográficos y violentos «parece alarmante», escriben. Creen que “las pantallas no son la causa de los trastornos del neurodesarrollo”, pero piden “vigilancia” para “evitar la amplificación de los síntomas”.
Para «recuperar el control», piden impedir todo uso de las pantallas por parte de niños menores de tres años, abriendo posteriormente, entre los tres y los seis años, un acceso «muy limitado», «con contenidos de calidad educativa y acompañados de un adulto». Debemos «limitar al máximo» el uso de teléfonos móviles y televisores en las maternidades, propone además la comisión, que desearía que se prohibieran los ordenadores y televisores en las guarderías y en las aulas infantiles. Pide “acciones reforzadas” con los cuidadores de niños.
La comisión también recomienda autorizar únicamente los teléfonos móviles a partir de los 11 años, a través de un teléfono sin internet hasta los 13 años. A partir de los 13 años, sugiere regalar un teléfono inteligente sin acceso a las redes sociales, para luego abrir este acceso a partir de los 15 años, sólo en las redes “éticas”. El grupo de expertos pide luchar contra los «servicios depredadores» de los actores económicos, como el «desplazamiento infinito» o el «lanzamiento automático de vídeo», y permitir a los usuarios configurar mejor las funcionalidades y el control parental de las aplicaciones.