Dos pandas gigantes prestados al Reino Unido hace doce años volaron de regreso a China el lunes por la mañana, mientras las relaciones diplomáticas entre Londres y Beijing se enfriaban. En cuarentena desde principios de noviembre como preparación para el viaje, Yang Guang, un hombre, y Tian Tian, ​​una mujer, abandonaron el zoológico de Edimburgo en un avión de carga que los llevará a la ciudad de Chengdu, en la provincia de Sichuan.

Los científicos esperaban durante mucho tiempo que el dúo, que llegó en 2011, aprovechara su estancia en Escocia para reproducirse, pero no tuvieron bebés. Yang Guang y Tian Tian habían sido prestados como parte de un acuerdo de 10 años entre la Real Sociedad Zoológica de Escocia (RZSS) y la Asociación China para la Conservación de la Vida Silvestre.

Los dos pandas “han tenido un impacto increíble, inspirando a millones de personas a preocuparse por la naturaleza”, afirmó David Field, director ejecutivo del RZSS, citado por la agencia PA. Estos fueron los únicos ejemplares de esta especie en peligro de extinción presentes en el Reino Unido, y llegaron gracias a la “diplomacia panda” liderada por Pekín, que pululaba por todo el planeta con sus úrsidos para sellar la mejora de sus relaciones diplomáticas.

Pero las relaciones se han vuelto tensas en los últimos años entre China y algunas potencias occidentales, incluidos Estados Unidos y el Reino Unido. El mes pasado, tres pandas gigantes prestados al Zoológico de Washington desde el año 2000 también regresaron a China. Otros cuatro pandas también abandonarán el zoológico de Atlanta durante 2024.