Varios drones ucranianos fueron derribados por la defensa aérea rusa cerca de Kursk, una ciudad cercana a la frontera con Ucrania, anunció el gobernador de la región la madrugada del viernes. “Esta noche, varios drones ucranianos fueron derribados por un sistema de defensa aérea cerca de Kursk”, dijo Roman Starovoyt en Telegram. «Pedimos a los residentes de Kursk que mantengan la calma, la ciudad está bajo la protección confiable de nuestro ejército», agregó el gobernador.

La región fronteriza rusa de Kursk ha sido, desde el comienzo de la guerra, bombardeada periódicamente por las fuerzas ucranianas. Las autoridades rusas habían afirmado la víspera que las fuerzas ucranianas habían intentado «invadir» la región rusa de Belgorod, cien kilómetros más al sur, y habían llevado a cabo fuertes ataques en esta zona que dejaron una decena de heridos.

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Intensamente bombardeada durante varios días, la región de Belgorod fue escenario la semana pasada de una espectacular incursión de hombres armados desde Ucrania, que planteó dudas sobre la solidez de la defensa de la frontera rusa. El miércoles, las autoridades rusas comenzaron a evacuar a los niños de las zonas particularmente afectadas de esta región.

Otra localidad apuntada según las autoridades rusas, la de Chebekino, de 40.000 habitantes, situada a unos diez kilómetros de la frontera con Ucrania.

En el lado ucraniano, Kiev experimentó un nuevo ataque mortal el jueves. Según las autoridades ucranianas, la defensa antiaérea destruyó los diez misiles rusos que tenían como objetivo la capital, pero la caída de los escombros, que cayó en particular cerca de una clínica pediátrica en el distrito de Desnianski, mató a tres personas, incluido un niño, y a 16 herido.