(París) La ATP, que gestiona el circuito profesional de tenis masculino, anunció el jueves que autorizará a los jugadores a partir del 15 de julio a llevar sensores de datos físicos en los partidos para «analizar el rendimiento y prevenir lesiones».
“Los sensores generarán información de última generación para los jugadores a partir de mediciones físicas como frecuencia cardíaca y datos de carga de alta intensidad, mejorando su análisis de partidos y entrenamientos”, explica la ATP en una nota de prensa.
El organismo ha aprobado dos sensores, STATSports y Catapult, y centralizará los datos en su plataforma lanzada en 2023 ATP Tennis IQ para ofrecer a los jugadores toda una serie de estadísticas vinculadas a sus partidos.
La ATP asegura que los datos recogidos por los sensores “se mantendrán confidenciales”.
Estos sensores entrarán en funcionamiento el día después de Wimbledon (del 1 al 14 de julio) en los torneos de Hamburgo, Newport, Gstaad y Bastad.