Un paseo estimula la digestión y aporta nueva energía. ¿Pero sabías que puedes perder peso caminando? Lee aquí tres consejos para que tu caminata sea realmente efectiva.
Caminar todos los días es un verdadero refuerzo para la salud. Esto se debe principalmente a que reduce el riesgo de muchas enfermedades, por ejemplo diabetes, hipertensión arterial o enfermedades cardiovasculares.
Caminar también fortalece el sistema inmunológico, favorece la digestión y mejora el estado de ánimo. Si desea hacer algo adicional para su estado físico, los siguientes tres consejos le ayudarán.
Este cambio es probablemente el más simple y, sin embargo, extremadamente efectivo: cambie la velocidad de vez en cuando mientras camina. Si caminas más rápido, no sólo quemas más calorías, sino que también estimulas tu metabolismo.
No es necesario dar un paso de ganso. Todo lo que necesitas hacer es aumentar la velocidad durante unos minutos y luego volver a reducirla.
Consejo: si escuchas música mientras caminas, puedes simplemente aumentar el tempo durante una canción y luego continuar a un ritmo pausado con la siguiente canción. Esto puede ayudarte a acelerar el ritmo conscientemente de vez en cuando.
Si ya tiene práctica en aumentar el ritmo, puede agregar caminar de puntillas de vez en cuando. Después de unos pocos pasos notarás la tensión en tus pantorrillas.
Si esto te resulta demasiado fácil, también puedes tensar conscientemente los glúteos y entrenar tanto los glúteos como las pantorrillas. Aunque al principio puede resultar agotador, este ejercicio es extremadamente eficaz y transforma un paseo tranquilo en una secuencia deportiva de tonificación.
Al principio puede que te sientas un poco extraño al caminar de repente hacia atrás en el parque. Sin embargo, cambiar la dirección de carrera de vez en cuando tiene numerosos efectos positivos.
Los investigadores han descubierto que caminar hacia atrás puede mejorar el equilibrio y la movilidad tanto en niños como en adultos con accidente cerebrovascular. Las personas mayores que caminan habitualmente hacia atrás tienen menos probabilidades de caerse. Si caminas hacia atrás con regularidad, tu marcha normal se vuelve más equilibrada porque entrenas tu coordinación.
Lo mejor es probar este ejercicio primero con un compañero de entrenamiento para evitar caídas. Alternativamente, también puedes entrenar caminando hacia atrás comenzando mirando hacia atrás con la mirada hacia el hombro. Este ejercicio es divertido y además te pone en forma.
Es bueno para tu cuerpo y mente salir a caminar todos los días. Pero una caminata no puede reemplazar un ejercicio adecuado.
Que caminar sea suficiente para usted depende de su objetivo individual. Si desea desarrollar músculo, es más probable que los entrenamientos lo consigan. Pero si quieres favorecer tu salud y hacer algo bueno por tu cuerpo, no necesariamente tienes que hacer ningún ejercicio adicional además de tu caminata diaria.
El original de esta publicación «Si haces tres cosas, perderás peso mientras caminas» proviene de FitForFun.