En definitiva, no deberíamos contar con ellos. Reunidos en la oficina nacional el martes por la tarde, los socialistas señalaron que no participarían en la manifestación contra la «violencia policial» de este sábado 23 de septiembre. Por lo tanto, no se unirán a las procesiones con sus socios Insoumis de la Nupes, en primera línea con las asociaciones en la organización de esta marcha parisina.

Los socialistas cuestionan especialmente la idea implícita de que la violencia en la policía es «sistémica» y también dicen que se sienten incómodos con ciertos eslóganes como «todo el mundo odia a la policía». La defensa de la abaya en la escuela por parte de estas mismas organizaciones en los últimos días finalmente les ha convencido. “El riesgo es transformar esta manifestación en pro-abayas…”, lamenta un responsable del PS.

Dentro del Partido de las Rosas, algunos todavía decían que estaban “mixtos” antes de que la oficina nacional se reuniera sobre la decisión de participar o no. «Hay una fuerte exigencia de la gente de izquierda para que se reconozca que algo no funciona en la policía», subrayó un ejecutivo. Para responder a pesar de todo, el PS prevé realizar un “trabajo en profundidad” que debería tomar “la forma de una convención nacional” para pensar cómo reformar la policía.

Por tanto, los socialistas comparten la opinión de los comunistas, que también optaron por no participar. “Para mí, esta manifestación está tomando un rumbo que no comparto, por eso no estaré allí”, indicó la semana pasada Fabien Roussel, secretario nacional del PCF.