Un supervisor del centro penitenciario de Saint-Quentin-Fallavier (Isère) fue agredido con aceite hirviendo por un recluso y tratado por quemaduras, dijeron el viernes 31 de marzo los sindicatos y la Dirección Interregional de Servicios Penitenciarios (DISP) desde Lyon.
Según Alain Chevallier, secretario regional del sindicato UFAP UNSA, el detenido roció al guardia con aceite hirviendo después de haberlo llamado. El portero recibió un golpe «en ambas piernas, en la mano y en el estómago».
Según Kamel Sayah, representante sindical de Force Ouvrière y supervisor en el centro de detención preventiva de Chambéry, sufrió quemaduras de primer y segundo grado que lo dejaron totalmente incapacitado para el trabajo (ITT) durante 11 días. Al confirmar la agresión, la DISP señala que “el supervisor pudo obtener tratamiento médico rápido (y) fue rápidamente dado de alta del hospital”.
«La DAP (dirección de la administración penitenciaria) y la DI (dirección interregional) le brindan su apoyo y permanecen en contacto con él», indicó a la AFP Méline Rodde, gerente de comunicación de la DISP Lyon. El detenido fue puesto bajo custodia, dijo. Tras el ataque, los empleados del centro, que no tienen derecho a huelga, iniciaron un «movimiento social», negándose a «tomar su puesto» y bloqueando de hecho la prisión, dijo Kamel Sayah. Méline Rodde confirmó «un movimiento de personal» en Saint-Quentin-Fallavier desde el viernes por la mañana. Se espera que el director interregional, Paul Louchouarn, llegue al lugar por la tarde, dijo.