Una frase ejemplar. La enfermera inglesa declarada culpable de los asesinatos de siete bebés recién nacidos fue sentenciada el lunes 21 de agosto a cadena perpetua irreductible. Lucy Letby es la peor asesina de niños en la historia moderna del Reino Unido.

Una sentencia de tal severidad, sin posibilidad de excarcelación, es muy rara en el derecho inglés y está a la altura del horror causado por este caso. Se pronunció contra Lucy Letby en el juzgado de Manchester (norte de Inglaterra), en ausencia de esta mujer de 33 años que se negó a acudir a la audiencia.

Esta mujer, “fría, calculadora, cruel y tenaz” según la fiscalía, mantuvo su inocencia a lo largo de su largo y agotador juicio, que comenzó en octubre de 2022. Trabajaba en la unidad de cuidados intensivos para bebés prematuros del hospital Condesa de Chester. Hospital en el noroeste de Inglaterra.

Los asesinatos tuvieron lugar allí entre junio de 2015 y junio de 2016. En particular, inyectaba aire por vía intravenosa a recién nacidos prematuros, usaba sus sondas nasogástricas para enviar aire o una sobredosis de leche al estómago.

El juez James Goss justificó la sentencia por «la excepcional gravedad» de sus delitos: «Pasarás el resto de tu vida en prisión». «Hubo premeditación, cálculo y astucia en vuestras acciones», insistió, refiriéndose a «una campaña calculada y cínica» de asesinatos, «al borde del sadismo» y sin remordimientos.

Sintió que solo la asesina podía conocer sus motivos, pero notó el «entusiasmo distante por las resurrecciones» que mostró cuando intentaba revivir a los niños que había dañado. Después de un mes de deliberación, los jurados la encontraron culpable el viernes 18 de agosto del asesinato de siete recién nacidos prematuros y seis intentos de asesinato, pero comienzan a surgir dudas sobre el verdadero alcance de sus crímenes.

La policía continúa estudiando miles de archivos en busca de posibles víctimas adicionales de Lucy Letby. El domingo por la noche, el periódico The Guardian informó que la policía estaba investigando docenas de incidentes «sospechosos», que involucraron a 30 bebés.

Se acusa a los servicios hospitalarios de haber ignorado las señales de alarma en este caso para proteger su reputación. La ausencia de Lucy Letby para la sentencia del viernes y la sentencia aumentaron aún más el escándalo. “Cuando hemos cometido crímenes tan horribles, es cobarde no enfrentar a las víctimas”, dijo el primer ministro Rishi Sunak el lunes 21 de agosto y agregó que estaba considerando legislar para que esto ya no suceda.