El ex director de Frontex, la agencia de la UE responsable del control fronterizo, anunció en una entrevista a JDD publicada el sábado por la tarde que se uniría a la manifestación nacional (RN) para las elecciones europeas de junio. Patrice Leggeri aparecerá tercero en la lista de Jordan Bardella. “La RN tiene un plan concreto y capacidad para ejecutarlo. Estamos decididos a luchar contra la avalancha migratoria, que la Comisión Europea y los eurócratas no consideran un problema, sino más bien un proyecto: puedo dar testimonio de ello”, declaró Fabrice Leggeri al Journal du Dimanche.
Este alto funcionario francés de 55 años, enarque y normalien, ocupó el cargo de director de Frontex de 2015 a 2022, antes de dimitir. “Mi objetivo es poner mi experiencia y mis conocimientos al servicio de los franceses. Habiendo dirigido Frontex durante casi siete años y trabajado para el Estado durante unos treinta años, especialmente en los ámbitos de la seguridad y la gestión de la inmigración, esta decisión es muy coherente”, dijo a JDD. “Las elecciones europeas del 9 de junio representan una oportunidad única para volver a poner a Francia y Europa en el camino correcto. Por eso me sumo a la lista encabezada por Jordan Bardella”, añadió.
Jordan Bardella, cabeza de lista y presidente del RN, lidera actualmente todos los sondeos de cara a estas elecciones europeas, con un 30% aproximadamente, con unos diez puntos de ventaja sobre la mayoría macronista. La incorporación de este alto funcionario es una señal del deseo del partido de extrema derecha de ampliar su grupo de expertos y tecnócratas para ganar credibilidad y poder algún día ejercer el poder.
Fabrice Leggeri había dimitido de la dirección ejecutiva de Frontex cuando fue objeto de un informe privado de esta organización que, según informaciones de prensa, le criticaba por «no haber respetado los procedimientos, por haber demostrado deslealtad hacia -hacia la Unión Europea Sindicato” y siendo responsable de “mala gestión personal”. “En relación con estas acusaciones, es importante señalar que ni el Parlamento Europeo ni la junta directiva de Frontex han encontrado pruebas concretas que las respalden”, afirma Fabrice Leggeri en el JDD.
“En realidad, por querer controlar la inmigración me presionaron y sentí un abandono generalizado. El gobierno francés me presionó para que dimitiera. Alemania no estaba dispuesta a apoyarme. La Comisión Europea, claramente hostil hacia mí, quería que me fuera”, añadió. Con sede en Varsovia, Frontex es una de las agencias políticamente más expuestas de la Unión Europea. Sus recursos, que reúnen a guardacostas y guardias de fronteras, se han reforzado periódicamente para hacer frente a la afluencia de inmigrantes en las fronteras europeas.