Le Figaro Burdeos

Hechos potencialmente muy graves pesan sobre un médico, que ahora tiene prohibido ejercer, debido a acusaciones de acoso y agresión sexual a mujeres vulnerables. Hace unos meses se presentó una denuncia y la gendarmería intenta ahora reunir el mayor número posible de testimonios de posibles víctimas de este ex practicante, establecido en la localidad de Ambarès-et-Lagrave, al norte de Burdeos.

Según la gendarmería, todas las presuntas víctimas de este médico tienen el mismo perfil. A menudo padecían problemas de relación o de salud y, en ocasiones, estaban bajo tratamiento farmacológico.

“Sean cuales sean los plazos, las circunstancias o las personas implicadas, la gendarmería anima a declarar a las personas que tengan información”, detalla la convocatoria de testigos. Ya se han reportado más de diez víctimas, pero podría haber más.