¿Declarará Hezbollah la guerra a Israel? El líder del partido chiita libanés apoyado por Irán, Hassan Nasrallah, habla este miércoles 3 de enero a las 16 horas GMT (17 horas en Francia, 18 horas en Líbano). Este esperado discurso, que podría incendiar la subregión, se produce un día después de la muerte del número dos de Hamás, Saleh al-Arouri, asesinado en un ataque con aviones no tripulados israelíes en los suburbios de Beirut. El tiroteo tuvo como objetivo las oficinas del movimiento islamista palestino, responsable del atentado terrorista contra Israel del pasado 7 de octubre, que dejó más de 1.140 muertos en Israel, en su mayoría civiles. Ayer por la tarde, el poderoso partido proiraní afirmó que este “asesinato no quedará sin respuesta ni castigo”, calificándolo de “grave agresión contra el Líbano”.

Desde el 7 de octubre, el miedo y el riesgo de que el conflicto se extienda se ciernen sobre el País de los Cedros. Su frontera con Israel es escenario de intercambios de disparos, principalmente entre el Estado judío y Hezbolá. Más de 160 personas murieron en el Líbano, la mayoría combatientes del “Partido de Dios”, pero también más de 20 civiles, entre ellos tres periodistas, según la AFP.

El 3 de noviembre, el secretario general de Hezbollah desde 1992 habló por primera vez desde el 7 de octubre. Un discurso sorpresa en el que se abstuvo de declarar directamente la guerra al Estado judío. “Una escalada en el frente (libanés) depende primero de la evolución de la situación en Gaza, luego del comportamiento del enemigo sionista hacia el Líbano (…) Le decimos al enemigo: «Quien pueda pensar en atacar el Líbano o llevar a cabo una operación preventiva sería la mayor estupidez de su existencia», advirtió, condicionando la entrada de su partido en la guerra a la acción israelí en territorio libanés.

Una semana más tarde, el 11 de noviembre, el Sayyed, título honorífico reservado a los descendientes del profeta cuyos seguidores lo honran, afirmó en un segundo discurso que su formación comenzaba a utilizar nuevas armas en sus ataques diarios contra Israel, en particular drones. suicidios y misiles Burkan “capaces de transportar cargas explosivas de 300 a 500 kilos”.

El brazo armado de Hezbolá, que felicitó a Hamás por su mortífero ataque, se presenta como una de las puntas de lanza del “eje de resistencia” a Israel y Estados Unidos en Oriente Medio. Si su arsenal en la frontera de Israel puede apuntar a infraestructuras o ciudades clave en el Estado judío, el ejército israelí, apoyado por Washington, sigue siendo claramente superior.