«La mayoría de las víctimas podrían haberse evitado», afirmó Petteri Taalas, jefe de la Organización Meteorológica Mundial, dependiente de la ONU, durante una rueda de prensa en Ginebra el jueves 14 de septiembre. Señala la desorganización ligada a la inestabilidad política que sufre Libia desde hace años.
Con una mejor coordinación en este país asolado por una grave crisis política, «se podrían haber emitido alertas y los servicios de gestión de emergencias podrían haber evacuado a las personas, y podríamos haber evitado la mayor parte de las pérdidas humanas», afirmó Petteri Taalas.
Una inundación repentina del tamaño de un tsunami azotó el este de Libia el domingo, matando al menos a 4.000 personas y dejando miles de desaparecidos. El aumento de las aguas destruyó dos represas río arriba de la ciudad de Derna, y manzanas enteras de casas fueron arrasadas. Según Petteri Taalas, la desorganización que afecta a Libia, incluidos sus servicios meteorológicos, contribuyó en gran medida a la magnitud del desastre.
Subrayó que los años de conflicto interno que asolan el país han «destruido en gran medida la red de observación meteorológica», al igual que los sistemas informáticos. «Se produjeron inundaciones y no se produjeron evacuaciones porque no se disponía de los sistemas de alerta temprana adecuados», afirmó.
Si se hubieran producido evacuaciones, el número de víctimas habría sido mucho menor, añadió. De hecho, se había declarado un toque de queda en varias ciudades del este del país, incluida Derna, lo que obligó a los residentes a quedarse en casa. «Por supuesto, no podemos evitar por completo las pérdidas económicas, pero también podríamos haberlas minimizado implementando los servicios adecuados», afirmó.
El Centro Meteorológico Nacional (CMN) de Libia emitió alertas tempranas de condiciones climáticas severas con 72 horas de anticipación e informó a las autoridades gubernamentales por correo electrónico, instándolas a tomar medidas preventivas. El viernes las autoridades del este de Libia declararon el estado de emergencia y crearon una unidad de crisis. Pero la OMM dijo que no estaba «claro» si «(las advertencias) fueron difundidas efectivamente».