(Saint-Jérôme) En su cama de hospital, Jano Vincent confesó a su expareja que había querido quitarse la vida en la autopista 50. Había puesto “el pie en el fondo” al volante de su camioneta F-150. camión. Así lo dijo el martes su exmujer al jurado en el juicio contra Jano Vincent, acusado de haber matado a un hombre mientras intentaba acabar con su vida.
El juicio del hombre de 37 años comenzó la semana pasada en el juzgado de Saint-Jérôme. Jano Vincent está acusado del asesinato en segundo grado de Robert Campion. Según la teoría de la Corona, Jano Vincent tenía toda la intención de suicidarse el 6 de octubre de 2019 tras un conflicto con sus padres.
Jano Vincent se puso al volante de su Ford F-150 y chocó de frente con la vehículo recreativo conducido por Robert Campion en la autopista 50 cerca de Grenville-sur-la-Rouge. Un enfrentamiento a más de 100 km/h. Según la Corona, se trató de un gesto “voluntario” por parte de Jano Vincent.
Por tanto, la cuestión del suicidio está en el centro de este proceso, ya que es el motivo invocado por la acusación. “El acusado utilizó su Ford F-150 como arma y la utilizó contra él mismo y el Sr. Campion. Por eso, según nuestra teoría, cometió un asesinato”, explicó el fiscal Steve Baribeau al inicio del juicio. Forma equipo con el Sr. Alexandre Dubois.
Julie Léveillé era pareja de Jano Vincent unos meses antes de la fatal colisión. Ella le dijo al jurado el martes que el acusado llegó al fondo del barril. Un conflicto monetario con sus padres por la venta de una casa estaba envenenando su vida. Incluso sus padres lo perseguían.
“Ya no era él mismo, había perdido mucho peso. No entendía cómo un padre podía hacer eso. Lo veía consumirse todos los días. Viví con eso. Estaba devastado. Completamente destruído. Lo rompimos por completo”, testificó.
Dos días antes del accidente, Julie Léveillé le dijo que había conocido a otro hombre. Ya se habían separado en ese momento. “Él no lo aceptó. Me dijo que quería vengarse de mí”, dijo al jurado.
Después de la fatal colisión, Jano Vincent estuvo hospitalizado durante mucho tiempo. Cuando recuperó el conocimiento, su expareja fue a visitarlo. Fue allí donde le confió su verdadera intención.
“Me dijo que se quería quitar la vida en el 50. Que se quería morir. Que ya no podía soportarlo más. Allí me dijo. Era la primera vez que me admitía que había querido suicidarse. Directo así”, dijo Julie Léveillé.
Unos meses más tarde, Jano Vincent volvió a intentar suicidarse ingiriendo pastillas. Julie Léveillé alerta entonces a los servicios de emergencia. El hombre dejó una carta de 15 páginas para sus padres. En su misiva, el acusado dijo que había quedado “incapacitado” porque quería “terminar con [su] vida de mierda”.
Al inicio del juicio, el fiscal de la Corona destacó al jurado la importancia de esta carta. “Ésta no es una carta ordinaria escrita en circunstancias ordinarias. […] Preste especial atención al contenido y a los comentarios que emanan del acusado en esta carta”, insistió el señor Baribeau.
El juicio continúa esta semana ante el juez Mario Longpré.