Diez nuevos cuerpos fueron exhumados el martes por la mañana en un bosque del este de Kenia, donde la policía investiga la muerte de miembros de una secta que practicaba ayunos extremos con fines religiosos, señaló en el lugar un periodista de la AFP.

Se veían cinco cuerpos envueltos en bolsas azules para cadáveres, mientras que otros cinco fueron desenterrados de una fosa común poco profunda, dijo el reportero, lo que elevó a 83 el número de muertos en el caso que ha desatado horror e indignación en este país del este de África.