La Comisión Europea propuso el martes 5 de marzo reforzar drásticamente la industria de defensa de la UE frente a la amenaza rusa, para también depender menos de Estados Unidos en la producción de armas. En detalle, propone que de aquí a 2030, «el 50% del material militar» encargado por los Estados miembros sea suministrado por la industria europea, declaró a la prensa su vicepresidenta, Margrethe Vestager, mientras que el 68% de las compras de armas realizadas en la UE para el Los beneficios de Ucrania provienen de fabricantes estadounidenses, afirmó el Comisario europeo Thierry Breton, responsable de la industria de defensa.

Bruselas quiere animar a los 27 a adquirir equipos militares juntos creando condiciones favorables para programas de compra conjunta. «No estamos aquí para financiar» la compra de armas, sino para ayudar a los Estados miembros a hacerlo mejor y juntos, aclaró Breton. La nueva estrategia europea de defensa, presentada el martes por la Comisión, tendrá un presupuesto inicial de 1.500 millones de euros.

“No es mucho dinero”, admitió Vestager. Pero esta suma servirá como un incentivo, una bonificación para los Estados miembros cada vez que quieran aunar sus recursos para adquirir o desarrollar la producción de armas en Europa, añadió. «La financiación real procederá de los Estados miembros», explicó el Comisario de Competencia. Los países de la UE gastaron el año pasado 58 mil millones de euros para adquirir armas, dijo el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell. El presupuesto de la UE no “reemplazará” los presupuestos nacionales para alcanzar esta suma, subrayó.

Sin embargo, la Comisión sugiere utilizar los ingresos generados por los activos rusos congelados en Europa para aumentar este presupuesto inicial en 1.500 millones de euros. Unos 200 mil millones de euros de activos rusos del Banco Central de Rusia han sido congelados en Europa. El Comisario Breton, por su parte, mencionó un presupuesto de unos 100 mil millones de euros durante varios años para permitir a los europeos desarrollar su industria de defensa, hacerla competitiva frente a los Estados Unidos y reforzar la ayuda a Ucrania en la guerra iniciada por Rusia.

Algunos países europeos están a favor, pero otros, como Alemania, se muestran mucho más reacios. «Tendremos que trabajar en ello en el marco de un futuro mandato», indicó Breton. El mandato de cinco años de la actual Comisión finalizará a finales de este año.