La France insoumise pidió el martes a Emmanuel Macron que sometiera a referéndum las normas presupuestarias europeas para validar el recorte de 10.000 millones de euros del gasto público anunciado el domingo por Bruno Le Maire.

“El Gobierno debe, si quiere imponer la austeridad a los franceses, asumir su política y someterse a la aprobación de todo el pueblo francés”, instó en rueda de prensa la futura presidenta cabeza de la lista rebelde a las elecciones europeas, Manon Aubry. Denunció “nuevas normas presupuestarias europeas que impondrán un sangrado social y un sangrado medioambiental”. «No evitaremos un debate democrático sobre esta cuestión», añadió la jefa de los diputados rebeldes, Mathilde Panot.

En caso de negativa – muy probable – del Presidente de la República, la izquierda radical no descarta organizar un referéndum de iniciativa compartida, añadió Mathilde Panot, hablando de una «carnicería social anunciada por Bruno Le Maire». «Estos 10.000 millones de euros son un anticipo de una ola de austeridad como nunca hemos experimentado», denunció Manon Aubry, copresidenta del grupo Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, señalando con el dedo el nuevo pacto fiscal europeo. «No podemos aceptar estos recortes en los presupuestos públicos sin que se consulte a la representación nacional y esto se haga por decreto», afirmó.

El gobierno confirmó el martes que aprobaría regulaciones y no un proyecto de ley de finanzas modificado para 2024 para regular los aproximadamente 10 mil millones de ahorros adicionales anunciados el domingo. El presidente de la Comisión de Finanzas, el rebelde Éric Coquerel, pidió el lunes escuchar a Bruno Le Maire sobre esta cuestión.

«Cuando un ministro es invitado por el presidente de una comisión, debe responder», afirmó Mathilde Panot, reconociendo sin embargo que «Eric Coquerel no tiene el poder de enviar moteros directamente frente a la casa de Bruno Le Maire». «En una democracia que funciona normalmente, la representación nacional tiene voz y voto sobre esta cura de austeridad sin precedentes que se ha vuelto a anunciar y cuyos contornos no conocemos exactamente», añadió.