Tops

Desde sus primeros tiros, el crack de Bondy cambió el juego. Kylian Mbappé ha abierto su contador de goles y ya va camino de la reconciliación con la afición del PSG. No alineado en el once inicial de Luis Enrique, el máximo goleador de la historia del club capitalino entró en el arranque de la segunda parte para intentar poner remedio a la carencia ofensiva de su equipo. Inmediatamente sobre el césped, el ex monegasco hizo hablar su velocidad y su técnica, desequilibrado en la superficie por el desafortunado Nicolaisen, Mbappé obtuvo un penalti que transformó a la perfección para su regreso a la élite tras el culebrón de este sido el capitán de la selección. El Blues ya demostró que era fundamental en el ataque parisino al marcar el primer gol de una larga serie.

Logan Costa, el héroe del TFC en la final de la Copa de Francia ante el Nantes, mostró sus cualidades físicas ante los parisinos. Asentado en una defensa de cinco hombres, el caboverdiano fue decisivo. Más allá de su intervención salvadora al final del partido contra Mbappé, el defensa de 22 años ganó la mayoría de sus duelos. Limpio en la recuperación, tranquilizó a su defensa ya su portero ante la constante presión de los jugadores de Enrique. Por aire o por tierra, Logan Costa era rey para disgusto de Gonçalo Ramos y el ataque parisino.

Para su ansiado estreno, Ousmane Dembélé ya ha aportado grandes garantías al ataque parisino. Entrando al partido al mismo tiempo que su compatriota y amigo Kylian Mbappé, el ex azulgrana hizo hablar su velocidad por su banda derecha. Veneno de verdad, Dembélé tenía hormigas en las piernas. Sus remates y sus aceleraciones hieren a los defensores del TFC. Bueno en el juego rápido con toque de balón, el último fichaje del PSG ha logrado su estreno con la camiseta rojiazul.

fracasos

Frente al Lorient, Gonçalo Ramos tuvo problemas para expresarse. El exdelantero centro del Benfica fichado por 80 millones de euros de bonificación incluidos este verano aún no ha dejado huella en sus nuevos colores. Frecuentemente encontrado por sus compañeros, al internacional portugués le faltó precisión en el último gesto. En los duelos aéreos sufrió la ley de Costa y Nicolaisen. En cuanto a sus compañeros, hubo que esperar a la llegada de los cohetes de Mbappé y Dembélé para ser realmente peligroso en los últimos metros.

Ya cuatro puntos perdidos en dos jornadas para el Paris Saint-Germain. Aunque estos dos primeros partidos sirvieron de calentamiento para encontrar automatismos y adaptarse al estilo de juego de Luis Enrique, el balance no es el ideal. La temporada pasada, el PSG fue un éxito en sus dos primeros encuentros con seis puntos en dos partidos. Este año la situación ha cambiado mucho con dos puntos sacados en otros tantos partidos. El club capitalino ya está dejando escapar serios competidores por el título. Con las recepciones de Lens, Niza y Marsella y un viaje a Lyon, París deberá ser más resolutiva para no perder demasiados puntos en el camino.