Emmanuel Macron, decidido a continuar sus viajes de campo a pesar de la honda ligada a la reforma de las pensiones, acude el martes a Vendôme (Loir-et-Cher) sobre el tema de la salud. El Jefe de Estado, acompañado por el Ministro de Salud, François Braun, visitará el Centro Universitario Multidisciplinario de Salud (MSPU) de la ciudad.

Discutirá con el personal de enfermería sobre “los problemas de acceso a la atención, atractivo de la profesión y formación”, precisó el Elíseo, en un contexto de creciente desertificación médica en el territorio. Este centro de salud está integrado por médicos, matronas y enfermeras. En conjunto con la Universidad de Tours, capacita a jóvenes médicos todos los años.

Para hacer frente a la desertificación médica, Emmanuel Macron abolió el numerus clausus, que limitaba la formación de nuevos médicos, y duplicó el número de centros de salud -hoy hay 2.251 en Francia-, pero las necesidades siguen siendo evidentes. Durante sus saludos a los actores de la salud el 6 de enero, prometió acelerar la contratación de asistentes médicos, que pueden realizar actos simples para aligerar la carga de los médicos, y prometió que los pacientes en cuidados a largo plazo (ALD) por dolencias sin un médico tratante se ofrecerá uno a finales de año.

Leer tambiénÉlisabeth Borne intenta anular una disputa en curso

Emmanuel Macron, que ha sido muy impopular desde la aprobación forzosa de la reforma de las pensiones, ha anunciado su intención de «reinvolucrarse» en todas las direcciones en el debate, con el deseo declarado de contactar con los franceses y apaciguar al país de aquí el 14 de julio. Muy atrasado durante la revisión de la reforma en el Parlamento, reanudó sus viajes por la región a razón de dos salidas por semana. Los dos primeros, en Bas-Rhin el miércoles y Hérault el jueves, fueron recibidos con abucheos.