(Anáhuac) La sequía ha matado a miles de peces al secarse un lago en el norte de México, constató el miércoles un fotógrafo de la AFP.
Voluntarios arrojaron cal el miércoles para evitar que los cadáveres de peces en descomposición causen enfermedades en los alrededores del lago Bustillos (3.300 km2), en el estado de Chihuahua.
De la zona emana un olor fétido y, en algunos lugares, el terreno pantanoso dificulta el paso de los vehículos que recogen peces muertos.
El ayuntamiento del pueblo vecino, Cuauhtémoc, había publicado un comunicado: “Buscamos personal temporal para limpiar la laguna de Bustillos”.
Según las autoridades locales, los niveles de agua son en promedio inferiores al 50% de su nivel habitual.
“Con la disminución de la cantidad de agua, los contaminantes se concentran más y afectan a las especies que aquí habitan”, explicó a la prensa Irma de la Peña Meraz, jefa del departamento de Ecología del municipio de Cuauhtémoc.
Los primeros peces muertos aparecieron hace una semana.
Al 31 de mayo, la sequía moderada, extrema o excepcional afectaba al 89.58% del territorio mexicano (casi dos millones de kilómetros cuadrados), según un mapa de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Se batieron récords de temperatura, incluso en la capital, Ciudad de México, con nueve millones de habitantes, con 34,2 grados.
